lunes, 20 de octubre de 2014

Qué estáis haciendo?

Sintiendo mi piel erizarse al escuchar la mierda que sucede en este mundo. El telediario es peor que una telenovela de drama. Asco me da que haya personas que disfrutan y se ríen de ello. ¿Qué tiene de gracioso que un hombre mate a sus hijos a palos para vengarse de su ex mujer? ¿Y que el asesino de tu hija cambie su versión de los hechos cada mes? Creer que nuestros problemas pueden ser siquiera llamados problemas es un gran error. Suspender es malo? Que un chico no te quiera es malo? Más que no tener para comer por el simpe echo de haber nacido en un país pobre? Mientras tanto adolescentes del 1er mundo le piden dinero a sus padres para luego gastarlo en matarse a si mismos de nombre conocido como tabaco. ¿Qué coño hacéis? Os matáis por antojo cuando otros darían la vida por tener la vuestra, esa que tanto odiáis, esa que cambiaríais de un plumazo. Parad y pensadlo de nuevo, joder. Veo a personas haciendo tonterías solo para ser populares, famosos. ¿Eso queréis ser? ¿Personajes televisivos? Eso es igual de repugnante que quedarse de brazos cruzados mientras una pelea da lugar ante tu mirada divertida y los gritos de ánimo de las personas a tu alrededor, avivándola. Todo esto es una gran mierda. Admitid que no sois lo que os habría gustado ser admitid que no observáis la lluvia a través de la ventana si no es por mirar a la vecina de curvas prominentes o al vecino de músculos considerables, admitid también que tengo razón. Es ese momento, solo en ese momento, seréis humanos.


...

La herida no se cerraba porque la sutura estaba hecha de puntos suspensivos, pero le puse un punto y aparte y comencé otro párrafo...
Escribí dos letras, seguidas de dos puntos para comenzar MI historia, lo único que importaba desde hoy.
Yo: Sin siquiera abrir los ojos, ya sabía que hoy iba a empezar algo nuevo, diferente... No me equivocaba, mi nueva historia.
Todo comienza en esos campos verdes de algún lugar de Irlanda, tumbada en ese césped, la brisa recorriendo todo el valle, acariciando las flores, los árboles, mi pelo moviéndose ligeramente y olor a fresco... Aquel cielo tan azul y tan inmenso que se reflejaba en los charcos que la lluvia había creado, yéndose tan rápido como había llegado. Se escuchaba el graznido de algún que otro cuervo y el piar de los pajarillos. Podía sentir bajo mi cuerpo, el retumbar de las olas que rompían cerca de allí. Cerca pude escuchar unos pasos y al alzar la cabeza vislumbré a aquel corcel negro que conocía tan bien, ese al que hace dos meses encontré vagando por las colinas. Se había hecho fuerte tanto en cuerpo como en alma. Era mi mejor amigo desde entonces. Esto? Es solo mi soñado futuro, y algún día será mas que eso, un sueño. Será mi vida.


 



viernes, 23 de mayo de 2014

Too tired...

No estoy depre, solo cansada. Bueno, puede que sea eso, que la coraza que he creado para protegerme, cuando estoy débil se debilita. E incluso desaparece, entonces todo me afecta, tanto para bien como para mal. Es decir, que no me hablas? Me deprimo. Eres bueno? Soy feliz. Ese caparazón que he puesto en mi mente se agrieta y me dejo llevar por la acumulación. A veces para bien, si. Pero bueno, realmente, dejarse llevar no es bueno porque hay que tener nuestra propia forma de pensar. Personalidad se llama. YO tengo personalidad y a muchos les jode. Yo soy original, o eso dicen. Hago las cosas porque quiero hacerlas y no hago cosas porque a mi alrededor las hagan. "Donde fueres haz lo que vieres", pues no lo pienso hacer solo porque un refranucho lo diga. Si todos hiciésemos eso, seríamos clones. Y eso sería escalofriante, tanto físico como mentalmente iguales... Bueno, yo no entiendo a esas chicas empeñadas en ser como otras, como modelos o famosas. Todas iguales: anoréxicas, altísimas y si cerebro. Por supuesto que hay excepciones, lose. Pero la mayoría son la típica Barbie y eso no lo soporto. Por eso, es depresión, solo es cansancio. Cansancio de aguantar el tirón, de ser fuerte por los que me quieren, de poder levantarlos a todos menos a mi misma, de batallar en mi interior por las estúpidas lágrimas que se empeñan en salir, de tener que ir siempre en guardia porque en cualquier momento me pueden saltar con un insulto o una burla, mirándome mal o algo así, de tener que forzar sonrisas, de esconder quien soy. Estoy cansada de todo. De ti, de mí, del mierda de clase, de la pija, del friki y también de aquel cani. De profesores,  alumnos y limpiadores. De padres, de madres, de familias geniales. Estoy cansada de no poder expresarme como querría porque no está permitido. De obedecer órdenes impuestas por bandos enemigos. Cansada de todo. Cansada de vivir. No soy como el resto.


martes, 29 de abril de 2014

¿Y en qué momento de mi vida me volví tan fría?



                                        

Ese sentimiento cuando alguien te quiere pero tu no sientes lo mismo, esa empatía que te entra al saber que tal vez está sufriendo, ese único momento en el que pronuncias la palabra "No" acompañada de muchas otras para hacer el rechazo más ameno y fácil de digerir. O tal vez le dices que sí por pena. O le dices que sí por que te gusta pero te das cuenta de que no es amor. Es un simple rollete que intentas sacar adelante, pero tanto tú como la otra persona sabéis que no tiene mucho futuro esa relación. Pero tu lo estás intentando. Estás intentando decirle "Te quiero" todos los días, estás intentando tener ganas de verle, estás intentando sonreír al ver un mensaje suyo. Lo estás intentando. Pero debes pensar que cada relación es una lección más. Si no las aprendes no llegarás al examen final en el que encontrarás a tu "Media naranja" o "Alma gemela". Por eso volver con tu ex no soluciona nada, porque figura repetida no completa la colección, porque si rompisteis por algo sería, porque entonces nunca averiguarás como pueden ser otras personas si siempre estás con la misma. Porque hay que experimentar con personas y de formas distintas. Hay un momento tras una relación, en el comienzo de otra, en el que te das cuenta de que has perdido la esencia del amor, que ya no quieres flores y corazones, que todo te da igual y que repeles los textos cursis y los "Te quiero". Que no te importa estar solo, saliendo con alguien o de rollo, que tu corazón se ha vuelto oscuro por culpa de un eclipse que pasó por él y dejó secuelas en forma de traición, que después de buscar algún alma que mereciese la pena, ahora que la encuentras, no la tratas como se merece. Ese momento en el que te das cuenta de que te has vuelto una persona fría.

domingo, 23 de marzo de 2014

El mundo al revés.

Érase una vez un mundo al revés, érase un hielo que abrasaba, un fuego helador, una fuente que la lluvia absorbía, un extintor que incendiaba y una cerilla que mojaba, érase una puerta apagada y una luz cerrada, un niño sentado en una mesa y una silla sentada en un niño. Érase una vez un avión acuático y un submarino volador, un coche con esquís y una moto-nieve con ruedas, érase un hombre gruñón muy simpático, una bruja buena, un príncipe malo, una princesa fea, un lobo niñera. Érase un lápiz que borraba y una goma que escribía, érase un simpático sicario y un payaso asesino, una monja guarra, una prostituta virgen. Érase un calvo con peine y un muñeco de nieve con frío. Érase una vez unas rayas redondeadas y unos puntos alargados, una trenza lisa, un sombrero plano. Érase una suma restada y una resta sumada. Érase una voz dormida, un sueño realista, unas orejas que hablaban, una boca que veía y unos ojos que escuchaban. Érase un gordo delgado y una anoréxica obesa, érase un suicida feliz y una niña muerta, érase una rubia lista, una científica retrasada. Érase una fresa amarga y un limón dulce, una amiga bruja, y un ex, príncipe. Érase una pared transparente y un vaso de hormigón, un plato de arena, una playa de cristal, érase el agua sólida, la piedra líquida, un hombre en una jaula al que alimentar. Un enchufe que da caricias, una mano que te va a electrocutar, una lengua seca y un desierto inundado. Una selva deforestada y una habitación llena de plantas. Érase un examen suspendido, un profesor ausente, permanente. Un estuche vacío y un bolígrafo gastado que escribe. Érase una vez una piscina salada, un mar dulce, una aspiradora que no abduce, una basura con olor a chuche. Érase un problema sin solución y un buen estudiante problemático. Érase una jirafa cuellicorta y un león vegetariano ... Y érase también un mal amigo y un amigable enemigo. Érase el mundo y luego, yo.

miércoles, 19 de febrero de 2014

La escalera a la libertad

Vivimos en una fantasía irreal que dista mucho de la realidad, esa que todos queremos evitar y olvidar que existe, sumergiéndonos en un sueño en el que hacemos lo que queremos, vivimos y sentimos lo que nos place y somos como somos sin que nadie nos diga qué hacer. Porque tu eres perfecta, para quien no lo seas que se joda. No se le puede gustar a todo el mundo. Tienes que gustarte a ti misma, sé que es difícil porque las opiniones de los demás también influyen, pero nunca más que las tuyas propias, recuerda eso siempre. Yo lo olvidé una vez y cometí un gran error haciéndolo, aparecen las inseguridades, los complejos... No te gustas a ti misma y los que se dan cuenta, aprovechan eso para hurgar en la herida. Porque siempre van a por la presa más débil, la más fácil.. Tu. Va pasando el tiempo y la cosa no cambia, hasta que llega alguien y te dice: "Me gustan tus ojos" una tontería, que para esa persona pueda serlo pero para ti es subir un escalón hacia la libertad. Liberarte de tus miedos, tus inseguridades, tus mierdas, tus complejos... Para llegar a ti misma. Y esa persona te va subiendo la moral todos los días con simples detalles, cumplidos que te ayudan mas de lo que nadie podría creer. Y un día te suelta un "Te quiero" así sin mas, que te hace subir cinco escalones de golpe. Pero claro, eso es solo de amigos y tu te has enamorado. Después de un tiempo sin saber por qué, te haces daño. Tal vez para contrarrestar el dolor mental con el físico... Entonces vuelve a llegar alguien con el que subes siete escalones de su mano, pero te hace tanto daño que te caes seis más abajo. Te vuelves a hacer daño una y ora vez. No te gusta, pero te alivia. Alguien se da cuenta y te pide que pares por favor. Que te quiere y no puede soportar que te hagas eso o simplemente sabe que decir en el momento oportuno. Y es por esas personas por las que mantienes la esperanza y decides vivir. Todavía te quedan muchos escalones por subir...